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 Salvajismo e indolencia

Periódico 4º. Poder

Miguel Ayax González Hubbard

Primero, la gráfica que llena de orgullo y esperanza en un futuro mejor; juntos, conviviendo pese a lo duro del clima y demostrando que pueden sobrevivir sin importar las adversidades, a los fríos extremos y a la permanente dificultad para conseguir el alimento; grafica que renueva la fe en la convivencia, un paso para demostrar acercamiento entre las razas; luego, como balde de agua fría la otra fotografía; fotografía que desnuda lo salvaje y estúpidos que podemos ser; que da a ver la falta de gobierno, compromiso, sensibilidad, orden y justicia.

Los animales que fueron introducidos para repoblar Coahuila son majestuosos, fuertes, grandes, espectaculares. Así son los bisontes.

Los otros animales son los cazadores, los que sin consideración matan tanta belleza a punta de balazos.

Los que presumen el crimen e invitan a nacionales y extranjeros a que vengan a cometer las mismas fechorías.

Animales los que debiendo proteger a esos seres indefensos ante la cobarde y ventajosa agresión, soslayan su responsabilidad, afirman no ser ellos quienes lo permiten y culpan a otros ámbitos del poder formal.

La foto es clara: hay un ser muerto, indefenso, aniquilado y a su lado, sonriente, el animal armado, sin escrúpulos ni vergüenza, digno de otros congéneres que pudiendo no evitan el crimen.

Igual están los encargados de evitar las aglomeraciones en fiestas particulares, en espectáculos, en bares que juntan gente sin ninguna precaución como en los de Gómez Palacio donde las autoridades municipales no sólo toleran sino que protegen estas irregularidades.

Animales hay de distintas especies.