No se les hizo
Miguel Ayax González Hubbard
Periódico 4º. Poder
Contra todo lo que esperaban, la visita a Trump
salió bien.
Los agoreros del desastre se quedaron con las ganas
de que hubiera contratiempos, desencuentros mejor y todavía mejor si se
pudiera, exabruptos o, lo que esperaban con ansia, insultos o regaños.
La visita fue cordial, limitada, solemne y formal
pero además, hubo tiempo para dialogar directamente, en privado, con franqueza.
¿De migración?, ¿Béisbol?, ¿drogas o armas?
Quién sabe, lo cierto es que cada presidente con
sus caracteres, sus maneras diferentes de ser, sus conocimientos, no dieron pie
para motivar nuevas críticas y exacerbar ánimos belicosos e intrigantes.
Muy a su pesar los opinadores de radio y televisión
quisieron resaltar la supuesta agresión de los simpatizantes del presidente a
dos reporteros que buscando “la nota”, trataban de entrevistar a los pocos
mexicanos que fueron a demostrar su enojo.
Tampoco les funcionó lo que estuvieron publicitando
acerca de que “los organismos empresariales” no fueron invitados a la visita y
trataban de minimizar a los que sí fueron y que estuvieron encabezados -ni más
ni menos- que por Carlos Slim.
Cómo estaría la junta presidencial que hasta
Fernández de Cevallos la elogió, claro, con sus peros respectivos.
Otro triunfo es que el voluble presidente
estadounidense nos pasó de delincuentes, narcotraficantes y quien sabe cuántas
cosas más, ahora -y por lo pronto- nos cree buenas personas.
Dijo por si fuera poco que ahora México y Estados
Unidos tienen “una relación maravillosa”.
¡Lástima Margarito! podrá decírseles pero tengan
calma, ya hallarán otros motivos para renegar e informar mal a la gente.