¡Ah, como me gustaría ser
funcionario!
Periódico 4º. Poder
De acuerdo a las estadísticas en México y en el
mundo la pandemia ha causada la pérdida de millones de empleos.
En países como Estados Unidos del llamado primer
mundo, los desempleados tienen un seguro llamado precisamente de desempleo y
ello amortigua un poco las necesidades para el sustento de las familias.
En México nuestro país si no hubiera sido por las
medidas implementadas por el gobierno como adelantar pagos a los pensionados
del IMSS y los programas asistenciales, la situación económica sería mucho
peor.
La falta de comida en la mesa de la familia más
honrada y creyente, acaba con la decencia, buenas intenciones, moderación y
solidaridad.
Habiendo hambre comienzan los robos y los saqueos,
cosa que por buena suerte y las medidas señaladas no han sucedido.
En el título de este comentario digo que cómo me
gustaría ahora ser funcionario, sí, pero de gobierno.
Regidor, jefe de departamento, legislador, incluso
bibliotecario o encargado de la ventanilla “D” del Departamento de Asuntos
Baladíes o “traidor” de archivos o refrescos y de ser posible y en el colmo de
la buena suerte ser tío, sobrino, cuñado o hermano de algún alcalde porque así,
la crisis económica que tenemos (y seguiremos teniendo) no me afectaría.
Millones de empleos perdidos y ninguno de
funcionarios, salvo los que la administración de AMLO ha venido haciendo desde
antes corriendo a tanto inútil parásito que se nutre del erario.
Los corridos son pocos, las sanguijuelas del
presupuesto existen por millones.