Periódico 4º. Poder
La denuncia hecha por el regidor gomezpalatino
Francisco Bardán Ruelas de haber sido abordado y amenazado por tres
desconocidos, exigiéndole cesara sus ataques en contra de la alcaldesa Marina
Vitela, es un error del funcionario que demuestra, pese a los cargos públicos
que ha ocupado, ignorancia y ridículo.
Ignorancia porque el cabildo no es lugar para
presentar una querella ni exigir una investigación.
Para eso están las agencias del Ministerio Público
y la Vicefiscalía General del Estado y, de acuerdo con lo expresado por el
regidor, no tuvo mas que su palabra para denunciar los hechos que, reales o
supuestos, quedan sólo en un relato que ninguno de los demás regidores (de
otros partidos) le creyeron.
Hizo el ridículo porque al hablar como
representante popular y ante sus pares, lo hizo igual que sus supuestos
agresores, explicando insultos, groserías y palabras soeces, en un salón lleno
de gente que no acude a escuchar asuntos de esa índole sino cuestiones que
tengan que ver con la buena marcha del municipio.
La actitud de Bardán que en la pasada
administración ocupó el cargo de oficial mayor hizo que la alcaldesa (más o
menos de igual edad que el regidor o menor) le contestara llamándolo “joven” y
diciendo que no le iba a quitar el tiempo por tener cosas de mayor importancia
qué hacer.
El pleito entre las pasada y la presente
administraciones se dilucirán en otras instancias pero si esa pelea la llevan
estos “paladines” la pasada puede darla por perdida.