Periódico 4º.
Poder (Facebook)
Ya no sabe uno ni qué pensar; las cosas andan tan
revueltas, el odio y la agresividad están a flor de piel que cada vez son más
las balaceras contra inocentes principalmente en Estados Unidos y luego nos
asombra ver a una jovencita bat en mano destruyendo con furia animal a un
automóvil que la había chocado.
El presidente del vecino país, el más poderoso del
mundo, instiga a la violencia contra los migrantes y sonríe de manera
aprobatoria cuando delante de él uno de sus partidarios dice que hay que
disparar contra los migrantes indocumentados.
Ni qué decir del gran número de curas pederastas
que durante años estuvieron abusando menores de edad.
Ahora nos informan los medios que Plácido Domingo,
el español adoptado mexicano, el cantante de una voz espléndida y singular, el
que ayudó física y económicamente a los afectados por el gran sismo de 1985 que
causó miles de muertos y devastó la ciudad de México, está acusado por varias
mujeres de acoso y violación.
Dicen que de plácido nomás el nombre tiene y que
por eso ahora, después de dos décadas o más lo acusan en cortes de Estados
Unidos.
El mundo anda revuelto, la gente ya no siente
respeto por nada ni por nadie y así... no vamos mas que al desastre.
Por lo pronto, la Ópera de Los Ángeles anunció que
destituye al cantante como su director y varias organizaciones internacionales
le están cancelando contratos de presentaciones con lo que la vida del cantante
cambiara -para mal- de manera radical.
En el pecado arrastra la penitencia.