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                            Salvador Allende en La Laguna

Fernando Rangel de León

        

El mismo día, el 11 de septiembre de 1973,  por la mañana, en que llegó la noticia a la Laguna, del Golpe de Estado de Augusto Pinochet, con el que derrocó al Presidente de Chile, Salvador Allende, dos escuelas, una secundaria en Torreón, y otra preparatoria en Matamoros, cambiaron sus nombres por “Doctor Salvador Allende” y “Compañero Salvador Allende”, respectivamente; por acuerdo unánime de los alumnos, los maestros y sus directores Profesor Mario Cepeda Ramírez, y Licenciado Fernando Rangel de León, respectivamente.
         Los alumnos, profesores y directores de las mencionadas escuelas estábamos muy sensibles a todo lo que significara abusos y arbitrariedades del Ejército en cualquier parte del mundo en contra del Estado de Derecho; pues acababa de pasar en México la represión estudiantil del 68, que muchos de nosotros vivimos.
         Por lo que el bombardeo aéreo del ejército al Palacio de la Moneda, residencia presidencial en Santiago de Chile, y laheroica defensa de su Presidente legítimo Salvador Allende, en donde prefirió morir a renunciar, y que gobernó  para el bien  de los pobres y de las grandes mayorías, no podía pasar desapercibido en la Laguna, tierra de luchadores sociales, de maestras y maestros con mucha conciencia social egresados de las normales de Santa Teresa, Coahuila, Aguilera, Durango, San Marcos, Zacatecas, Cañada Honda, Aguascalientes, Galeana, Nuevo León, Saucillo y Salaices, Chihuahua, y otras normales rurale
         Pero gobiernos priístas infiltraron estudiantes y directores mercenarios en las escuelas   “Doctor Salvador Allende” y “Compañero Salvador Allende”, que les cambiaron el nombre; siendo el de esta última Preparatoria “Marino Ortiz”; para tratar de borrar y olvidar el nombre del primer presidente socialista en el mundo, que llegaba a la Presidencia por medio del voto; lo cual constituía un mal ejemplo; pues no se quería que hubiera democracia en México.
           Desde ese trágico golpe de Estado,  hace ya 50 años, ha transcurrido medio siglo en el que no solamente no se ha borrado y olvidado su nombre, sino que se ha agigantado en el mundo porque al igual que Francisco I. Madero, en México, donde su chacal fue Victoriano Huerta, y el de Salvador Allende, en Chile, fue Augusto Pinochet; son unos apóstoles de la democracia.
           Inclusive el caso de Salvador Allende, fue el ejemplo para que naciones como Francia y España, tuvieran  presidentes  socialistas llegados por los votos, a François Mitterrand, y a Felipe González, respectivamente; y los cuales se han estado multiplicando en el mundo.
         Es que esos grandes hombres que luchan por altos ideales y cuyas obras  trascienden, pertenecen a una causa inmarcesible.