Continuidad, sí; continuismo, no, en UTT
Fernando
Rangel de León
La comunidad de la
Universidad Tecnológica de Torreón UTT, está muy contenta y optimista por la
llegada del Licenciado Carlos Alberto Centeno Aranda, a la Rectoría, en cuyo
campus, se respira un ambiente de libertad de expresión y de asociación; sobre
todo del Sindicato Único Democrático de Trabajadores de la Universidad
Tecnológica de Torreón SUDTUTT, encabezado por el Doctor Cuauhtémoc de la Cruz
Serrano; que estuvo sojuzgado por la tiranía del anterior rector Raúl Martínez
Hernández, por largos y tardados ocho años.
SUDTUTT, como toro de
buena casta se creció a ese castigo del ex rector, trabajando mejor sus
agremiados y elevando más la calidad de sus servicios docentes, administrativos
y manuales, en bien de la UTT, a la que colocó entre las mejores del país; lo
que seguramente seguirán haciendo y mucho mejor con el nuevo Rector.
El nuevo Rector para
salir adelante de la mano del SUDTUTT, necesita un equipo de trabajo con
personas idóneas que le sean afines a él y fieles a la institución y no
vasallos como lo fueron con el anterior rector, J. Ventura Luna Vera, ex
secretario de Rectoría, ahora Director de Carrera; Óscar Alberto García de la
Garza, titular del Órgano de Control Interno; José Ramiro Compeán, abogado
general; Laura Ofelia Zermeño Casas, directora de Administración y Finanzas;
Lorena Guerrero Reséndez, jefe de Recursos Humanos; Jaqueline Dávila Silva,
subdirectora de Servicios Académicos; José Manuel Rodarte Carrazco, subdirector
de Servicios Administrativos; Ramón Heredia Martínez, director de Carrera; y
Óscar Romero Flores, jefe de Mantenimiento e Instalaciones; quienes apartándose
de sus deberes institucionales fueron instrumentos ciegos de Raúl Martínez
Hernández, para golpear sistemáticamente al SUDTUTT.
En caso de que dichas personas sigan ocupando
esos puestos y lo desempeñen con la misma política represora contra el SUDTUTT,
entonces el ex rector seguirá siendo el “poder tras el trono”; padeciendo el
continuismo, la prolongación de los malos funcionarios; cuando lo que se
necesita es continuidad, la prolongación de las buenas obras y servicios