Periódico 4º Poder
Y “eres misógino” me dijo la alcaldesa de Gómez Palacio, Marina Vitela
Rodríguez, en una conferencia de prensa celebrada el pasado martes en el nuevo
Hospital General de Gómez Palacio, encabezada por el gobernador José Rosas
Aispuro Torres y por el secretario de Salud, doctor
Sergio González Romero para tratar lo de la pandemia que regresa; la
construcción del nuevo Centro de Justicia para las Mujeres que se construye en
este municipio y el constante mejoramiento del propio hospital con mas
quirófanos, salas de ginecoobstetricia y equipo indispensable para la atención
de los pacientes.
Va de cuento… llegué a la conferencia el primero aunque ya en el lugar
estaba todo dispuesto con sillas, aparato de sonido, tres palestras que serían
ocupadas por el gobernador, el secretario de Salud y la alcaldesa; minutos
después llegó la jefe de Comunicación Social del gobierno estatal en La Laguna,
Patricia Fernández con un cuaderno que puso en mis manos y como en ese preciso
momento alguien llegó a saludarla, no me dijo para qué me lo daba y yo, creyendo
que como en otras partes nos piden el nombre y el medio que representamos, lo
escribí y añadí “4º. Poder”.
Bueno, la alcaldesa dio la bienvenida, el doctor González expuso la
situación respecto a la pandemia y el gobernador amplió la explicación,
felicitó al personal médico por sus esfuerzos y dijo que entre médicos,
enfermeros, administradores, personal de intendencia, ambulantes, etcétera, hay
mucha satisfacción por el nuevo nosocomio que, según una de las enfermeras le
manifestó, estar allí era como vivir en una residencia después de haberlo hecho
en una casa del Infonavit.
De allí pasaron a las preguntas y respuestas; los compañeros haciéndolas
y los funcionarios, el gobernador y el secretario de Salud, contestándolas.
Nadie preguntó nada a la alcaldesa quien se mantuvo en silencio.
Casi al término de la conferencia la directora de Comunicación Social
del Gobierno del Estado, Verónica Terrones quien estaba cediendo la palabra a
quienes interrogaban, me mencionó, dijo “ahora pregunta Miguel Ayax de 4º.
Poder”, hecho que me cogió por sorpresa porque no había dicho que quisiera
hacer pregunta y hasta después supe que el cuaderno donde apunté mi nombre era
la lista de los que querían hacer algún cuestionamiento.
Con el micrófono dije que sí, que quería hacer no una sino dos preguntas
y la primera dirigida al doctor Rosas Aispuro le cuestioné por qué en lugar de
hacer tanta inversión en “el aterrizaje para las cigüeñas” -expliqué:- para qué
gastar tanto en consultorios, quirófanos y todo lo necesario para las parturientas
sin hacer una campaña preventiva e intensa para evitar tanto embarazo.
El gobernador contestó que se hacen estas campañas pero que no hay
límite para atender a las mujeres embarazadas sean de este municipio, los
aledaños e incluso de otras entidades.
La segunda pregunta fue sobre el costo, la capacidad y el lugar donde se
construirá el Centro de Justicia para las Mujeres y rápido y pronto me dieron
respuesta.
Pensé que mis dudas habían quedado aclaradas pero no conté con que la
alcaldesa pidió el micrófono y dijo entre otras cosas que por qué yo sólo
hablaba de las mujeres que se embarazan y no de los hombres causantes de esos
embarazos y por qué no pregunté además si no hay campañas de vasectomías.
Al término, estuve cerca del gobernador (la alcaldesa a un lado) y a él
le comenté, después de lo dicho por Marina Vitela que quizás me había oído muy
machista pero la alcaldesa rápidamente volteó y me dijo “eres un misógino”.
Lo del “aterrizaje para las cigüeñas” se trató porque se estaba hablando
de los lugares para tratar a las parturientas y no a los hombres; no me siento
para nada misógino primero porque soy padre de tres mujeres y otras que me
rodean, hermanas, primas, amigas, jamás han dicho algo respecto a un desaire,
maltrato o discriminación de mi parte.
Recordé que ella, Marina Vitela, sí tiene a un misógino en su
administración, en un puesto de primer nivel, que determina compras y con quien
hace o no contratos el municipio: su Oficial Mayor.
Karol Wojtila, el individuo en cuestión, es homónimo del nombre de pila
del Papa Juan Pablo II y sin duda por él fue así bautizado pero, siendo
funcionario en la capital del Estado, Durango, fue despedido por eso, por
misógino, grosero y lépero.
Fue subsecretario de Desarrollo Social del gobierno de Jorge Herrera
Caldera y fue cesado por hablar de “las morras”, exhibiendo sándwiches como las
vaginas de las mujeres, explicando que sólo hay de dos tipos; uno con “el
jamón” oculto y otro salido al aire.
Cuando lo despidieron del cargo estatal y mucho antes de ser rescatado
por la alcaldesa Marina Vitela, uno de los medios de comunicación de la ciudad
capital dijo que hizo lo que “nadie en su juicio haría, publicar gráficas
demostrando nada de respeto a la mujer a la que denigra y ofende”.
También el ya ex funcionario (en Durango) “exhibe la incapacidad y falta
de todo sentido humano de los funcionarios corruptos, falta de inteligencia y
nula formación cívica y social”.
Agrega: “este episodio es el resultado de poner en cargos públicos a
gente incompetente que carece de todo sentido social y moral”.
Ése sí es un misógino y a ese misógino, lépero, grosero e inmoral Marina
Vitela lo mantiene en la administración pública, pagando favores que nada
tienen que ver con Morena ni sus supuestos postulados como aquellos de no
mentir, no robar no traicionar al pueblo y no ejercer el NEPOTISMO.
En estos comentarios incluyo una fotografía familiar tomada hace algunas
semanas donde estoy acompañado de mujeres que alegran, dan sustancia y alegría
a mi vida y entre ellas no están mis hijas. La gráfica estará también y de
manera temporal en mi perfil del facebook.
Ojalá otros pudieran hacer lo mismo y sentirse orgullosos de sus
relaciones familiares y de amistad.