Sin título

 
Carestía
Periódico 4º. Poder
Sabemos que la voracidad no tiene límites ni sentimientos, allí no caben los escrúpulos, ni la bonohemía, ni siquiera la piedad o la lástima.
En estos tiempos de encierro por la crisis sanitaria muchos de los comerciantes grandes y pequeños, han aumentado sin razón el precio de los productos que fabrican o expenden.
Antes, con los regímenes neoliberales los precios subían cada año al comienzo; en los eventos fortuitos como el incremento a los precios del azúcar o las gasolinas; hoy nada de esto ha sucedido, por el contrario, los combustibles cuestan menos, mucho menos que hace dos meses y sin embargo, ir al súper o a la tienda de la esquina es cada día más caro.
      Tal vez se alegue que como hay fábricas que han parado y como el transporte se dificulta, es propicio elevar precios.
         Sin embargo sabemos que hay producción de alimentos; que el transporte de carga tiene paso libre en todas las carreteras y que hay millones de personas que no están percibiendo salario ni ingresos los que tienen negocio propio.
       Entonces lo que queda es pedir a las autoridades que actúen, que multen a quienes sin motivo suben sus precios porque... pedir sentimientos y apoyo a esos voraces es pedir peras al olmo.
Ya lo decía un finado amigo: si eres comerciante, eres ladrón y aunque ello no aplica -desde luego- a todos, los que sí desprestigian la actividad y a sus compañeros.
Sin Bozal

.-INFORMACION PERIODISTICA LA PALABRA; es la mayor virtud y riqueza de un hombre, el que no la tienen ni cumple, esta hueco

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente