La denuncia de
Aideé
Periódico 4º. Poder
raro. Tampoco que se hagan acusaciones y se presenten demandas, al respecto los ejemplos cunden.
Ejemplos son los
que suceden a nivel federal porque la actual administración morenista tiene
infinidad de carpetas de investigación en contra de quienes los antecedieron y
no sólo contra los del gobierno de Peña Nieto sino que sus querellas las
amplían a regímenes pasados.
En los gobiernos
estatales se hizo casi costumbre que el gobierno entrante lanzara acusaciones
contra el saliente, ejemplo Chihuahua donde Javier Corral persiguió y sigue
persiguiendo (con buenos resultados) al corrupto César Duarte hoy en proceso de
ser extraditado para que se le juzgue por robo, prevaricación, desvío de
recursos, tráfico de influencia y todo lo imaginable porque nada raro sería que
le sacaran un video escupiendo en la calle o pasándose un rojo al ir manejando.
Otros usan las
acusaciones para apaciguar al grupo político que dejó el cargo y a veces se
hacen acusaciones sin ton ni son únicamente como “prevención” para que se ponga
un límite de actuación entre una autoridad y otra.
A nivel local, en
Gómez Palacio, una mujer, Aideé Román Zapata, regidora, presenta una denuncia
en contra de la alcaldesa Marina Vitela Rodríguez del partido Morena, su
síndico municipal Omar Castañeda González que tanto se cree y quiere que él
mismo se promociona como un “súper síndico” aunque dicho popular lo ha
bautizado como súper cínico y también contra el tesorero municipal Cuauhtémoc
Estrella quien le niega por sistema cualquier información o requerimiento.
La denuncia es
presentada ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y ante la Fiscalía
Anticorrupción por acoso, hostigamiento y violencia institucional, por negarle
lo que por ley le corresponde para el desempeño de sus funciones al
discriminarla en planes y acciones municipales.
La alcaldesa y sus
secuaces parecen olvidar que la regidora Román Zapata es miembro del
ayuntamiento y violentan ley y reglamentos para fastidiar a quienes les señalan
errores e irregularidades.
El “juntos hacemos
historia” de López Obrador el presidente y su partido en Gómez Palacio se ha
convertido en “otra mala historia” porque el actuar de estos funcionarios son
un abuso tras otro, un error tras otro, una ineficacia tras otra.
Más que una
administración morena ésta ha resultado negra por diferentes motivos: desconoce
compromisos con los proveedores y sin razón deja de pagarles, ejerce el inmoral
nepotismo, tan criticado... pero tan ejercido, exacciona a conductores de
vehículos de toda clase con cualquier pretexto, inventa infracciones y por ello
aplica multas, protege a unos cuantos -¿amigos o cómplices?- y tiene al
municipio abandonado en cuanto a obras y servicios pese a que en muchos
departamentos -que no han trabajado por la pandemia- los gastos son exagerados
y sin comprobación.
Llaman la atención
dos cuestiones: Una que la Procuraduría Anticorrupción no dé resultados claros
y precisos de los asuntos que trata y 2, la falta de apoyo para la regidora
afectada por parte de su partido, sus compañeros regidores y hasta de otros
partidos opuestos a Vitela y Castañeda que parece que nunca han oído aquello de
que “cuando veas las barbas de tu vecino cortar...”
¿Así cómo crece
progresa o se desarrolla Gómez Palacio?