fuente: EFE/ABC/EL FINANCIERO
"Tenemos derecho a disfrutar"
Wuhan, la ciudad donde comenzó a propagarse la covid-19 y la que vivió el primer gran confinamiento para frenar la pandemia, celebró en masa la llegada del año nuevo, casi como si nada hubiese pasado.
Desde primera hora de la tarde, riadas de personas atestaron el metro de la ciudad, de 11 millones de habitantes, para llegar a la calle peatonal de Jianghan, escenario de una aglomeración que sorprendió a los propios residentes.