Atiende IMSS-Acuña a paciente embarazada con cáncer de mama
*Tiene
32 semanas de gestación y la ilusión de traer al mundo una nueva vida *A
principios del 2020, los médicos le informaron que te tenía un tumor maligno en
el pecho
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Guadalupe tiene 43 años de edad, 32 semanas de embarazo y lucha contra el cáncer de mama, su
historia es única en Coahuila y representa un halo de esperanza para la madre y un reto para las y los especialistas del Hospital General de Subzona (HGSZ) No. 13 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en Acuña.
La
ginecóloga oncóloga, Paula Ximena Ferrer Torres, explicó que para el equipo
médico y multidisciplinario, este embarazo representa un reto y una oportunidad
para salvar la vida de una paciente oncológica y su bebé.
La
vida de Guadalupe, camarista de un hotel, casada y madre de dos hijos,
originaria de Cuernavaca, Morelos, dio un giro radical en noviembre del 2019,
al notar una protuberancia en su seno izquierdo mientras se bañaba.
Como
no tenía antecedentes familiares de cáncer, pensó que se trataba de un bolita
de grasa y acudió a consultar a la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 81 del
IMSS, donde la derivaron al Hospital General de Zona (HGZ) No. 11 en Piedras
Negras.
Mientras
esperaba los resultados de la biopsia, buscó también los servicios de un médico
particular, porque aparecieron náuseas, vómitos y otros síntomas.
El
29 de abril, supo que estaba embarazada. “Lupita”, como le llaman sus seres
queridos, estaba confundida; era una buena noticia, pero debido a las
circunstancias, no sabía si era lo más adecuado.
El 16 de mayo, en su cita con el oncólogo en Piedras Negras le confirmaron su sospecha, también tenía cáncer de mama y requería de un tratamiento urgente.
“El
doctor me dijo que tenía cáncer y yo le anuncié que estaba embarazada”, expresó
la camarista. “Sentí miedo, angustia, estaba en shock y tenía muchas dudas”.
Afirmó
que lo primero que pensó fue en sus dos hijos, y le preguntó al doctor si
podría continuar con su embarazo. El oncólogo ordenó su atención con otro
especialista. Entonces, fue canalizada al
HGSZ No. 13, donde la Dr. Ferrer Torres se hizo cargo de su atención.
El
26 de junio recibió su primera quimioterapia, hasta el momento lleva cuatro de
ocho sesiones, el tratamiento sigue su curso sin interrumpirse y no afecta al
producto, informó la especialista. El pasado 06 de octubre, se le practicó una mastectomía radical
modificada que consistió en retirar la mama y los ganglios de la axila, el
tumor tenía un tamaño de ocho centímetros.
SIN ANTECEDENTES EN COAHUILA
Para
la ginecóloga oncóloga este tipo de casos son insólitos, es el primero en
Coahuila, y reveló que asumió el reto de atender a “Lupita” porque conoce de
antecedentes en el Hospital de Gineco Obstetricia en la Ciudad de México, donde
hizo su residencia.
Reiteró
que respaldan a la madre, a quien monitorean de manera permanente con el
compromiso de brindarle atención digna, oportuna y cálida.
“MI HIJO ES LO MÁS IMPORTANTE”
Aunque
otras mujeres podrían estar tristes por perder un seno, para “Lupita”
representa una oportunidad de vida y una esperanza para salvar la vida de su
hijo.
“En estos momentos, para mi hijo y mi salud, es lo más
importante”, expresó sin poder contener el llanto.
Con
valentía aseguró que tiene muchos motivos para salir adelante, su esposo, sus
hijos y un nuevo ser que se aferra a la vida, un guerrero a quien llamará
“Antonhy”.
“DIOS TE LLEVA DE LA MANO”
“Lupita”
espera que su testimonio sirva de inspiración a otras mujeres para que venzan
el miedo y sepan que la guerra contra el cáncer de mama no está pérdida.
Se
dijo agradecida con Dios, su familia y los especialistas del IMSS por su apoyo,
esfuerzo y dedicación. “Cuando te topas con gente buena en el camino, sabes que
Jehová te lleva de la mano”, concluyó