El grandote revuelto con los chiquillos
Periódico 4º. Poder
Decía
una señora de antes que la decencia dura hasta que aprieta el hambre; es decir,
que la arrogancia se termina cuando la necesidad se hace presente.
“El
Siglo” al que desde estas líneas hemos criticado por muy diferentes motivos,
como su parcialidad en ver lo que sucede de un lado del río y del otro, es una
fiera criticando al alcalde panista de Torreón y trata con guante blanco a las
autoridades morenistas de Gómez Palacio.
La
Laguna es una, sufre la misma escasez de agua, la contaminación en sus mantos
freáticos con arsénico es igual; casi casi la misma inseguridad y descuido en
cuanto a los servicios públicos.
Entonces
¿por qué todos los días se critica al del PAN y nada se dice de la administración
de Morena?
Porque
la de Marina Vitela cerró casi completamente su gasto en publicidad y “El
Siglo” es uno de los pocos privilegiados que siguen publicando (en espacios
bien delimitados) lo que a la alcaldesa le conviene.
En
el periódico de las esquelas no se ven los sobreejercicios de los departamentos
municipales; ni el nepotismo de alcaldesa y su “súper síndico”; los
funcionarios ineficientes e inmorales incrustrados en la nómina; es más, ni
siquiera ve la basura y las aguas negras que abundan en las calles.
Lo
peor es que ahora parece el medio boletinero de Marina y su “súper síndico”
Omar Castañeda (“Municipio merece obtener gran porcentaje de crédito: síndico”
en la página 5E) y contrastar que si el Simas es un mugrero, el Sideapa, como
lo dice en la (4E) del pasado sábado “eficienta su operatividad”.
Si
es cierto que la decencia dura hasta que aprieta el hambre, es más triste que
se acabe sólo con el temor de perder “el favor” municipal y ver.., al grandote
revuelto con los chiquillos.
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