Periódico 4º. Poder
Se puede estar de acuerdo con la
actuación de una autoridad o no; puede ser que gente que perdió privilegios,
influencias y canongías se sienta resentida; se puede comprender el rencor de
gente que cobraba como proveedor y que como ya no lo hace, sienta que lo
dejaron fuera dándole preferencia a otros.
En cuestión de los gobiernos públicos
-de cualquier nivel- los funcionarios se convierten en ricos y poderosos;
tienen recursos para dar y muchas veces aprovechan para sí el beneficio que
debe ser para todos.
Pruebas ¿para qué? si todos sabemos
de casos de corrupción de ayer, hoy y siempre.
Ello da pie para que gente que
envidia a los que disponen, determinan y gastan recursos públicos usen medios
reprobables para lastimarlos, desprestigiarlos y hacerles mala fama.
Las autoridades municipales de Gómez
Palacio han publicitado que en las redes están apareciendo (sobre todo en
facebook) páginas falsas que anuncian acciones y medidas en contra de la ciudadanía
y que ello confunde y crea animadversión.
Esas acciones son completa y
totalmente reprobables; primero porque son falsas, segundo porque están hechas
con perversidad que no sólo perjudican a los funcionarios sino a todos en el
municipio.
Además, para qué crear infundios y
mentiras; una buena vigilancia del actuar de los señalados y una estricta
vigilancia de los recursos económicos es más que suficiente para dar a cada
quien su lugar.
Por ello quienes hoy gobiernan y
administran deben tener el máximo cuidado de hacerlo bien, con eficacia,
prontitud y honradez.