Lerdantino
Periódico 4º. Poder
Un aplauso al alcalde lerdense Homero Martinez por
haber decidido no hacer el “Lerdantino”, festejo costoso, inútil e incluso
fraudulento.
El hacer un “festejo” en las calles donde corren
las bebidas alcohólicas, el ruido y muchas veces el desorden, son calles donde
también viven personas que quieren paz y tranquilidad dentro de sus casas.
El alcalde y su tesorero han argumentado no tener
recursos económicos suficientes para llevar al cabo el evento y aunque sea por
motivo de “la republicana austeridad” obligada por el gobierno federal a los
Estados y por ende a los municipios, también sirve para acabar con el
despilfarro que hacía la pasada administración de María Luisa González Achem,
acusada de malos manejos y desvío de fondos públicos, denuncia presentada en la
Fiscalía Anticorrupción donde -al parecer- duerme
el sueño de los justos.
Por un motivo u otro, qué bueno que, al menos en
algunas cuestiones, se muestre congruencia como lo es acabar con el laberinto
en las calles del centro y el capricho personal de abrir y cerrar calles al
antojo.