Ruindad
Periódico 4º. Poder
(Facebook)
Otro crimen artero contra
mujeres y niños ha ocurrido en parajes entre Chihuahua y Sonora cometido por delincuentes.
Mujeres y niños asesinados
y niños secuestrados suceden además de balaceras en Agua Prieta, Sonora, sin
que haya autoridad, civil o militar que frene estos hechos delictivos terribles
y reprobables.
Éstos no pueden ni deben
quedar como estadísticas, más cuando se trata en perjuicio de inocentes.
Siete niños baleados y
quemados adrede o por accidente de la familia LeBaron llena de ignominia no
únicamente al gobierno sino al pueblo de un país duro e insensible.
El gobierno y el Congreso
debieran endurecer las penas contra los asesinos y la sociedad toda reprobar
públicamente los hechos que causan zozobra y temor en toda la sociedad.
Resulta inexplicable que en
las calles circulen camionetas llenas de asesinos y no haya autoridad que les
haga frente.
¿Dónde están los organismos
de inteligencia? ¿Dónde la fuerza pública que les haga frente?
¿Que ya nadie puede
circular por ninguna calle o camino sin que su vida corra peligro?
México ha sido
tradicionalmente enemigo a la imposición de la pena de muerte pero, viendo lo
que sucede ¿no debieran replantearse las leyes?
Por doquiera hay asesinatos
y no sólo eso, sino robos, bloqueos, agresiones y nadie hay que, siendo
autoridad, lo impida.
¿Que culpa tienen niños de
cinco o seis años por lo que ni son responsables y ni siquiera saben?
Son las autoridades quienes
tienen la obligación de protegerlos porque sus padres son, igual que ellos,
víctimas de intereses que nadie comprende.
México así va a la más
completa anarquía.