Posesión controvertida
Periódico 4º. Poder (Facebook)
Aunque tomo posesión con el respaldo
del Congreso, Morena, la izquierda toda y la simpatía del presidente de la
república, Rosario Piedra Ibarra será cuestionada hoy y todos los días.
Su llegada a la titularidad de la
Comisión Nacional de los Derechos Humanos quedará en entredicho.
Nadie ignora que ella como su madre
sufrió las consecuencias de los crímenes y asesinatos del gobierno mexicano hace
décadas, crímenes y asesinatos que fueron callados por las autoridades
gubernamentales, militares y policíacas a fin de que la opinión pública las
olvidara.
Rosario Piedra Ibarra y sobre todo su
mamá, fueron activistas sociales infatigables; investigadoras tenaces y
persistentes para dar con el paradero de su hijo y hermano sin duda asesinado
pero, hoy la segunda, llega a la alta responsabilidad que tendrá muy
cuestionada, en medio de la controversia y la sospecha y será mantenida en el
cargo por sus partidarios simple y sencillamente porque pueden y lejos está de
sus intenciones conceder nada a la oposición, sobre todo al Partido Acción
Nacional que no ha sido un adversario ni moderado ni ecuánime y mucho menos
justo.
Ahora cualquier concesión de la izquierda
gobernante, se vería como un signo de debilidad.
Si tanto el PAN como el gobierno
llevaran otra manera de hacer las cosas; si Acción Nacional no tuviera como
paladín de sus causas al barbaján de Fox, quizás las cosas fueran distintas.
De cualquier manera el nombramiento y
la toma de posesión -a fuerzas- será base de nuevos enconos y disputas.
La imposición de que ahora se quejan
los miembros del PAN es, una empequeñecida similitud de cuando se impuso a
Felipe Calderón como presidente de la república en medio del fraude, la fuerza
y la ilegalidad.